El equipo de matronas de Policlínica Gipuzkoa son las especialistas que acompañan a la mujer en todo el proceso de la maternidad, con clases preparto, cuidados y atención en el momento de dar a luz, además de ofrecer toda la formación respecto a la lactancia.

“Ofrecemos clases de preparación al parto entre las semanas 33 y 37 de embarazo. Son cuatro clases de 3 horas cada una y en ellas se abordan desde las molestias en el último mes de embarazo, todo el tema del parto, cesárea, epidural, el post parto y toda la formación sobre la lactancia materna, –explica Adel Boullin, matrona de Policlínica Gipuzkoa –. Además, les enseñamos el hospital y los espacios donde darán a luz para que conozcan un poco más el entorno. Son clases que aportan mucha tranquilidad a la madre y a la pareja”.

El equipo de ginecólogos sigue detalladamente cada embarazo para poder detectar posibles problemas del feto antes del nacimiento. Para ello, se realiza la primera ecografía en el primer trimestre (entre las semanas 6 y 8), con el objetivo de conocer el número de embriones, la viabilidad de los mismos y datar la gestación. A partir de este momento, se realiza un seguimiento personalizado de cada embarazo, siendo lo habitual la realización de controles cada cuatro semanas.

Dar a Luz en Policlínica

Respecto a la asistencia al parto, se trata siempre a las pacientes de manera muy respetuosa con sus deseos, de acuerdo a sus necesidades y voluntades. La matrona recibe a las futuras madres, se ocupa de su ingreso y las monitoriza en la habitación para valorar la frecuencia cardiaca del bebé y las contracciones, acompañando a las futuras mamás en todo el proceso.
En Policlínica Gipuzkoa favorecemos un ambiente relajado para evitar cualquier tensión en la paciente. Además, siempre hay un ginecólogo presente en el momento de dar a luz y, junto a éste, se encuentra la matrona, el pediatra y las enfermeras. Todos ellos se esfuerzan para tratar de hacer del parto una experiencia inolvidable para la madre y el padre, quien -siempre que lo desee-, puede estar presente.

El primer contacto, el más importante

“Otorgamos mucha importancia al primer contacto que el bebé tiene cuando llega a este mundo, ya que el contacto de la piel con piel, crea un vínculo madre-hijo que, sin duda, va a ayudar en la lactancia materna, pero sobre todo va a ayudar al bebé a adaptarse al nuevo entorno en esa primera hora de vida y a dar seguridad y tranquilidad a la madre. Lo suelen agradecer mucho”, explica la matrona.

La lactancia es un tema que genera muchos miedos y dudas entre las madres, por ello, desde Policlínica Gipuzkoa se promueve una lactancia materna precoz, dándole a las pacientes toda la información necesaria para comprender todo lo que la lactancia engloba.

Nuestro acompañamiento no finaliza cuando las pacientes han dado a luz – explican las matronas–, desde sus propias casas, las madres siguen contando con nuestro apoyo, ya que las dudas siguen surgiendo son muchas. Consideramos muy importante llevar a cabo un acompañamiento para poder ofrecer un servicio personalizado a la madre, la pareja, y por supuesto, al bebé”.