Fuente: Diario Vasco

 Jesús Azcarate  Traumatólogo

¿Ha habido cambios importantes en las prótesis de rodilla?

Durante años la prótesis de rodilla ha sido habitualmente considerada por los pacientes como una técnica con peores resultados que la prótesis de cadera. Gracias a los estudios realizados en este campo tanto en lo relativo al diseño de los componentes, materiales y avances en instrumentación, hoy podemos afirmar que ha llegado a un nivel equiparable y en ocasiones superior a las prótesis de otras extremidades. Actualmente se están dando pasos orientados al diseño personalizado de estas prótesis y a la utilización de sistemas de navegación para una colocación más exacta, aunque todavía es pronto para asegurar su impacto en el resultado a largo plazo.

¿Es siempre necesaria una prótesis ante un problema de artrosis o hay otras soluciones?

La colocación de una prótesis es siempre el último peldaño en el tratamiento de la artrosis de rodilla. Siempre que es posible procuramos utilizar alternativas que no sacrifiquen la articulación. Dependiendo de la edad, del grado de intensidad de la artrosis y de su localización pueden utilizarse tratamientos menos agresivos, desde la medicación para aliviar la sintomatología, infiltraciones tanto de acido hialurónico como de plasma rico en factores de crecimiento y otros tipos de técnicas quirúrgicas menos agresivas como artroscopia, microfracturas, mosaicoplastias, osteotomías, etc.

¿Hasta qué edad se puede afrontar la colocación de una prótesis?

Si las condiciones de salud física y mental de la persona son aceptables no existe limite de edad. Los límites en este caso los ponen habitualmente los familiares que deben de hacerse cargo del paciente y, como ha ocurrido en algunos países, los políticos que ponen límites a financiar estos tratamientos en personas con corta esperanza de vida. Si preguntamos a la persona que sufre, por muchos años que ésta tenga, casi siempre quiere operarse.

¿Y los resultados? ¿Se puede desarrollar una vida normal?

Los resultados podemos decir que son buenos o muy buenos en un 90% de los pacientes permitiéndoles desarrollar prácticamente una vida normal para su edad. No tenemos que olvidar, sin embargo, que existen complicaciones potenciales que pueden ser graves por lo que no es una decisión que haya que tomar a la ligera.

La solución quirúrgica ¿queda para la gente mayor o también se aplica en jóvenes?


Hay que tener en cuenta siempre la relación riesgo/beneficio y solamente operarse cuando la intensidad del dolor y limitación percibidos por el paciente supera el riesgo de la intervención. El tema de la edad va ligado a la necesidad en pacientes jóvenes de tener que recambiar algún día la prótesis pero actualmente una prótesis de rodilla bien indicada y colocada puede durar perfectamente 20 años.