«La baja calidad de los óvulos en muchas mujeres ha aumentado la necesidad de donantes»
La Dra. Estefanía Rodríguez, ginecóloga y jefa del Servicio de Reproducción Asistida, afirma que hoy en día la ovodonación es uno de los tratamientos que más frecuentemente se realiza en las unidades de reproducción porque la calidad y la cantidad de los óvulos de las pacientes está disminuyendo.
La ovodonación es una técnica de reproducción asistida en la que el gameto femenino (ovocito) es aportado por una mujer donante, para ser implantado en una mujer receptora que desea ser madre. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE)uno de cada seis niños en el mundo nace mediante técnicas de reproducción asistida y, en mujeres que superan los 41 años, el 50% de nacimientos es por donación de óvulos. Y es que la baja cantidad y calidad de los óvulos en muchas mujeres ha aumentado la necesidad de donantes. Según la ginecóloga Estefanía Rodríguez, jefa del servicio de reproducción asistida del Hospital Quirónsalud Donostia y Policlínica Gipuzkoa, el factor que más afecta a la fertilidad de la mujer es la edad: “decidir a qué edad vamos a ser madres nos va a afectar mucho, tanto a la calidad como a la cantidad de óvulos”. Aunque subraya que existen otros factores como, por ejemplo, alteraciones genéticas, problemas de transmisión de enfermedades genéticas o incluso problemas de cantidad de óvulos con baja reserva ovárica en mujeres jóvenes.
Explica la doctora Estefanía Rodríguez que seleccionan cuidadosamente a las donantes “que deben cumplir unos criterios de salud, edad, fertilidad y aspectos psicológicos, ya que estos criterios garantizan la mejor calidad posible de óvulos para la receptora, optimizando así las posibilidades de embarazo”. En cuanto a quiénes pueden beneficiarse de esta técnica, Estefanía Rodríguez enfatiza «la importancia de evaluar individualmente a cada paciente, especialmente a aquellas con baja cantidad o calidad de óvulos debido a tratamientos previos o factores genéticos» y afirma que «la ovodonación ofrece una solución esperanzadora para estas situaciones».
La ovodonación requiere una cuidadosa coordinación
En palabras de la ginecóloga que dirige el servicio de reproducción asistida del Hospital Quirónsalud Donostia y Policlínica Gipuzkoa, con más de 6.000 embarazos logrados y pionero en Gipuzkoa, “el proceso de ovodonación implica una cuidadosa coordinación entre la donante y la receptora. Lo primero es hacer la selección de la donante según las características de la receptora, donde se tienen en cuenta diferentes rasgos como el color de pelo, de ojos, de piel… Al elegir a la donante -añade-, se le realiza un tratamiento de estimulación ovárica para poder extraer los óvulos. Mientras tanto, la receptora prepara su útero para recibir los embriones generados”.
Estefanía Rodríguez anima a “las mujeres jóvenes, que están en torno a la veintena, a donar óvulos para poder ayudar a otras mujeres a lograr el embarazo”, destacando no solo la gratificación de ayudar a otros a alcanzar la maternidad, sino también los beneficios personales, como la oportunidad de recibir evaluaciones exhaustivas sobre su salud y fertilidad, que pueden ser útiles en su propia maternidad futura.