La llegada de la tecnología ha supuesto un gran avance para abordar prácticamente la gran mayoría de los problemas de la patología torácica. A partir de la década de los 90 se incorporó una técnica llamada Videotoracoscopia, que permite tratar la mayoría de los procesos de la cavidad pleural sin la apertura tradicional del tórax, pudiendo operar a través de pequeñas incisiones con la ayuda de un monitor de televisión. Además de una mejor y más rápida recuperación del paciente, el dolor postoperatorio es menor y los beneficios en líneas generales, sobretodo para incorporarse al hábito laboral, son favorables.

¿Cuáles son los grandes hitos de la cirugía torácica y los últimos avances en estos años?

Los avances más importantes en estos últimos años han sido los relativos con el abordaje, es decir, todos aquellos relacionados con la facilidad de acceso a la cavidad pleural para tratar todos los problemas de los que se encarga un cirujano torácico.

La mejoría ha consistido básicamente en sustituir el abordaje clásico, es decir, una incisión de gran tamaño en el tórax a través de la cual separábamos dos costillas, por las técnicas de videocirugía. Estas son técnicas menos agresivas y consisten en realizar uno, dos o tres orificios como máximo y nos ayudamos de instrumental de última generación y de un monitor de televisión. Esto se traduce en una mejor y más rápida recuperación del paciente, el dolor postoperatorio es menor y los beneficios en líneas generales, sobre todo para incorporarse al hábito laboral, son favorables.

¿Para qué tratamientos es válida la videocirugía?

La técnica de videocirugía sirve esencialmente para la gran mayoría de los procesos benignos. Entre ellos destacaría una situación frecuente denominada hiperhidrosis palmar, se trata de sudor excesivo en ambas manos que hace que los pacientes se encuentren incómodos en sus relaciones sociales. El tratamiento es muy sencillo y se interviene mediante dos pequeñas incisiones y una intervención mínimamente agresiva que permite dar el alta a las 24 horas.

Desgraciadamente en la cirugía torácica sigue siendo el cáncer de pulmón la enfermedad que supone el máximo de intervenciones…

Sí, desafortunadamente el cirujano torácico tiene que trabajar diariamente con la parte menos amable que es el cáncer de pulmón. Esta enfermedad es claramente controlable si sobretodo se diagnostica en las fases iniciales y más precoces de la enfermedad, por eso se recomienda evitar sobre todo el tabaco, ya que está demostrado que el tabaco es la principal causa de predisposición al cáncer de pulmón.

Actualmente estamos viendo un descenso importante del cáncer de pulmón en pacientes que han dejado de fumar, sin embargo, desgraciadamente estamos viendo cómo las mujeres se han ido incorporando con posterioridad al hábito tabáquico y están aumentando en estos momentos los casos de cáncer de pulmón en mujeres, por eso recomendamos al igual que todas las autoridades sanitarias, la abstención del tabaco.