El internista Alberto García Zamalloa descubre una nueva causa, hasta ahora desconocida, para la enfermedad de la pleuritis bacteriana espontánea
El hallazgo ha sido publicado por la prestigiosa revista científica norteamericana “International Journal of Respiratory and Pulmonary Medicine”.
El médico internista, Alberto García Zamalloa, ha obtenido un interesante descubrimiento científico en Policlínica Gipuzkoa como consecuencia del estudio de una paciente que presentaba una pleuritis bacteriana espontánea. El artículo con la información científica ha sido publicado por la prestigiosa revista científica “International Journal of Respiratory and Pulmonary Medicine”.
La pleuritis bacteriana espontánea es un tipo de derrame pleural poco frecuente que se da en pacientes con patología de higado crónica (cirrosis). “Se piensa –según afirma García Zamalloa- que es un tipo de derrame que está infradiagnosticado”. En palabras del propio Alberto García Zamalloa, “en Policlínica tuvimos un caso de un paciente que vino a Urgencias muy mal, con fiebre y mucha dificultad para respirar, que ha sido el objeto de este estudio y descubrimiento”.
“En el ámbito médico -en palabras de García Zamalloa- se hipotetizaba hasta ahora que el origen de esta infección (pleuritis bacteriana espontánea) solía deberse a dos causas: bien por infecciones que pasan directamente por la sangre y de ahí a la pleura. O bien, por acumulación de líquidos en la pleura”.
“Sin embargo, en nuestro caso la infección se había originado por una infección respiratoria, no porque un líquido hubiera pasado desde el abdomen ni desde la sangre, como se pensaba hasta el momento, lo que ha supuesto que hayamos abierto la puerta a que se considere que también la vía respiratoria puede ser un acceso a que un líquido pleural de un paciente cirrótico se infecte”.
“Además –añade el médico internista guipuzcoano-, en estudio hemos aportado otro segundo descubrimiento, ya que observamos que resultaba muy llamativo que la infección hubiera tenido un mecanismo de comportamiento muy similar al de la pulmonía. Porque presentaba un ADA (adenosina deaminasa) muy alto –explica el especialista-, como presentan uno de cada cinco derrames pleurales que acompañan a las neumonías”. En palabras del internista de Policlínica Gipuzkoa, “el ADA es un marcador que se utiliza para el diagnóstico de la tuberculosis pleural y que, aparte de en la tuberculosis, se da en muy pocas enfermedades. Nosotros, con este estudio, hemos aportado una nueva entidad para esa corta lista de enfermedades que cursan con un ADA alto, que es la pleuritis bacteriana espontánea”, concluye Alberto García Zamalloa.